Con la temporada de cerezas en pleno desarrollo, los puertos chinos se han convertido en el epicentro de un impresionante flujo de cargamentos de cerezas frescas. Quelen Fruit no ha sido la excepción, y sus envíos han sido recibidos con excelentes comentarios por parte de los consumidores locales.
La frescura y la apariencia de la fruta son las características que han permitido al holding posicionarse como uno de los grandes competidores dentro de este exigente mercado. Raúl Orellana, gerente de Calidad y Postcosecha, comenta acerca de los diferentes procedimientos que implementan para que las cerezas lleguen en perfectas condiciones.
Consolidando presencia en el mercado
La temporada 2024-2025 de cerezas en Chile promete ser histórica, con una proyección de exportación de 124 millones de cajas. Este ambicioso objetivo busca consolidar a Chile como uno de los principales proveedores de esta preciada fruta en Asia, especialmente en China, donde la demanda aumenta significativamente durante las festividades de Navidad y Año Nuevo Chino.
Durante las primeras semanas, diversas exportadoras compiten por posicionarse como proveedores de alta calidad. Para destacar en este mercado, Raúl Orellana señala que es fundamental poner un especial énfasis en tres aspectos clave: la firmeza, niveles de brix (dulzor) y apariencia de la cereza. Esta es la base para garantizar un buen posicionamiento y el mínimo requerido para la fruta de exportación.
Un reto logístico: garantizando la frescura de las cerezas en su viaje a China
Uno de los mayores desafíos logísticos de Quelen Fruit es asegurar la frescura de las cerezas durante el largo trayecto desde Chile hasta China que, en promedio, considera un tiempo de 25 a 30 días por vía marítima.
Para lograrlo, Raúl Orellana detalla dos etapas clave en el proceso:
- Desde la cosecha hasta la planta procesadora: han implementado una estricta cadena de frío, utilizando hidrocoolers y frigoríficos para reducir la temperatura de campo, hidratar el pedicelo y maximizar la vida útil de la fruta.
- Del procesamiento a la exportación: las cerezas se envasan en bolsas de atmósfera modificada, ajustando los niveles de oxígeno y dióxido de carbono. El oxígeno se reduce entre un 10-12%, mientras que el CO2 se incrementa entre un 6-8%. Este proceso ralentiza la tasa respiratoria de la fruta, asegurando que llegue fresca y firme a su destino.
Raúl Orellana destaca que «la firmeza y el color verde del pedicelo son atributos clave para los consumidores chinos», ya que un pedicelo marrón es percibido como un indicio de pérdida de frescura.
Un futuro prometedor
Gracias a la implementación de tecnología avanzada, procedimientos rigurosos y un equipo comprometido. Las primeras cargas de cereza Santina de Quelen Fruit han sido exitosamente recibidas en Shanghái, donde se han destacado por su dulzura, firmeza y presentación.
Este año, la compañía se ha fijado la ambiciosa meta de procesar 15 millones de kilos de cerezas y, los resultados actuales indican que este objetivo está cerca de cumplirse.
Este primer paso es sumamente alentador para el holding que ha trabajado intensamente los últimos años para posicionarse estratégicamente como un proveedor de alta calidad en el mercado chino.